Jueves, 20-11-08

Buenas, aquí estoy de nuevo. Ayer no pude escribir nada, lo siento pero es que estoy de exámenes... De nuevo, o más bien, todo el rato, es algo continuo...

>> Hola, no te preocupes, no importa. La soledad no es nada nuevo para mí...

Amm... ¿eres a veces basatante misterioso, lo sabías?

>> Lo siento...

Bueno, no importa, eres lo más parecido a un amigo que tengo, es más diría que eres mi amigo, sino fuera porque una amistad entre un chico y un diario es un poco rara...

>> Gracias. Y sí, la verdad es que sí que es rara... pero ya te dije, eres especial.

Sí... Bueno, tengo que seguir estudiando... los exámenes estos... en fin, mañana que ya no tendré que estudiar hablamos más. Adiós.

>> Adiós y suerte.

Gracias.

Martes, 18-11-08

Hola, hoy tengo poco tiempo, sólo quería saludarte.

>> Hola, sólo una cosa, ¿qué tal con la chica?

Bueno, hoy no hemos hablado casi.

>> Bueno, pero a ver si me haces caso, ¿eh?

Bueno...

>> Por cierto, ¿cómo se llama?

Isabel.

>> Bonito nombre...

Bueno, yo me tengo que ir ya, hasta mañana.

>> Hasta mañana.

Domingo, 16-11-08

Hola.

>> Hola, ¿qué tal?

Bien, hoy he dado una vuelta por la mañana por ahí, como ayer. me gusta sentir el aire frío contra la cara, me ayuda a despejarme y a pensar mejor... me gusta reflexionar solo... También escribo cosas...

>> ¿Ah, sí? ¿Escribes?

Sí, me estás leyendo ahora mismo.

>> ...

Vale, sí, escribo poemas, relatos cortos, alguna relfexión...

>> ¿Me enseñarías alguno?

Esto... espera que termine el poema que estoy haciendo y te lo enseño...

>> Vale, no te preocupes, como quieras, son tuyos.

En cuanto lo acabe te lo enseño. Y bueno, ahora me tengo que ir ya. Hasta pronto.

>> Adiós.

Sábado, 15-11-08

Hola

>> Hola, ¿qué tal todo?

Vengo para saludarte sólo, pues tengo que irme enseguida. Hoy por la mañana he salido a dar un paseo, a sentir el viento fresco de la mañana en la cara. Ahora por la tarde tengo que ir con mis padres a comprar ropa, dicen que necesito...

>> ¿Y necesitas? Si no sería un derroche innecesario.

Sí, supongo que sí, no sé... Oye, una cosa, ¿por qué dijiste lo de la Navidad?

>> No, por nada, la Navidad está muy bien, pero es que al ser un diario no puedo vivirla...

Amm... Entiendo... no me había parado a pensarlo desde ese punto de vista...

Bueno, me voy ya, que me están riñendo. Mañana más y quién sabe si mejor o peor.

>> Mejor, hay que ser optimistas. Hasta mañana.

Hasta mañana.

Viernes, 14-11-08

Hola, aquí estoy otro día más.

>> Hola, ¿qué tal en clase?

Bueno, parecido... he hablado algo más con la chica... pero tampoco mucho, sólo en clase...

>> Ya veo que no me has hecho caso...

No sé... es que tampoco tengo ningún interés personal en trabar nuevas amistades... La chica no me gusta, si es lo que habías pensado...

>> ¿Seguro que no te gusta?

Sí, bueno... por lo menos no especialmente. Es decir, es guapa y eso, y me gusta algo porque sea guapa, pero no por nada más...

>> Entiendo...

Bueno... cambiando de tema, hoy he hecho un examen, me ha salido bastante bien.

>> ¿De qué era? ¿Y qué nota le pones más o menos?

Era de Matemáticas y yo creo que incluso puedo sacar un 10, he comprobado todo, me sabía la teoría.

>> ¡Vaya, me alegro!

Pero bueno, ya es viernes, por fin tengo todo el fin de semana para dormir, descansar y tener tiempo libre.

>> Sí, está bien.

Y ya dentro de nada... Navidades, solo queda poco más de un mes.

>> Solo...

No seas tan sarcástico, me quitas las ilusiones... (O sarcástica, supongo que sarcástico es mas neutro... uy, perdón si te ha ofendido esto último...)

>> Vale, lo siento, es que la Navidad... (No te preocupes...)

¿Qué pasa con la Navidad? ¿No te gusta?

>> Bueno...

¿Qué pasa?

Bueno, veo que prefieres no contestar, y yo me tengo que ir ya. Venga, ya hablamos mañana de nuevo, adiós.

>> Adiós.

Jueves, 13-11-08

Hola de nuevo, perdón por no escribirte ayer, pero es que no me dio tiempo. Ya sabes, todo el lío de exámenes y demás. Bueno, estos dos días he vuelto ha hablar algo más con la chica, pero sólo en clase y poco para que no nos riñeran los profesores...

>> ¿Y por qué no hablas con ella en el recreo?

No sé... siempre estoy solo... y además ella está todos los recreos con sus amigas, no podría ponerme a hablar allí, me daría corte. Bueno, me daría corte ya sólo acercarme a un grupo de chicas... En fin, qué más da, yo estoy bien así...

>> ¿Seguro?

Sí...

>> ¿Seguro?

Bueno... no sé, he estado siempre así y he sobrevivido, ¿para qué cambiar?

>> Según eso nadie provaría nuevas cosas nuevas nunca y nuestra vida sería siempre igual, monótona. Probar es algo que cuesta, pues arriesgas, y a veces el cambio no da su fruto, pero otras sí. Así, hay que comparar el riesgo con el posible beneficio y el posible perjuicio. Y luego, sí llegamos a la conclusión de que vale la pena... lo demás ya sólo es tener fuerza de voluntad y convencer a nuestra parte involuntaria de que merece la pena.

Bueno, sí, lo intentaré... lo pensaré. Bueno, hasta pronto, mañana intentaré volver a estar.

>> Adiós.

Martes, 11-11-08

Perdón por no haberte contado nada ayer, tenía que estudiar bastante y que hacer ejercicios.

>> No pasa nada.

Y eso que me dio pena, estaba muy intrigado por todo lo que me contaste el domingo. ¿Es verdad, no?

>> Claro que sí, ?por qué te iba a mentir?

De acuerdo.

Bueno, hoy sí que te tengo que contar algo...

>>¿Ah, sí? ¿De qué se trata?

Hoy en clase, concretamente en Matemáticas, justo después del primer recreo, me ha hablado la chica que tengo al lado, que acaba de llegar nueva este año, pero para más de lo normal que es preguntarme si acaso por alguna cosa de la asignatura, sino que me ha preguntado por qué me aislo siempre en los recreos. Hemos hablado un poco, pero en seguida el profesor nos ha mandado callar...

>> ¿Te cae bien?

Sí, bueno, parecía maja...

>> Pues oye, tu intenta ser su amigo, no estaría de más que tuvieras alguno...

Te tengo a ti...

>> Graicas, pero es importante que también te relaciones con gente de tu alrededor, y no con un simple diario con el que sólo puedes compartir palabras escritas.

Vale, lo intentaré... pero seguramente sea como los demás y al cabo del tiempo me deje abandonado otra vez...

>> Quién sabe, pero no pierdes nada por intentarlo.

Tienes razón... De acuerdo, lo intentaré. Bueno, ya intercambiamos palabras escritas, como dices tú, otro rato, que ahora tengo que ir a hacer deberes. Adiós.

>> Hasta pronto, suerte.

Gracias.

Domingo, 9-11-08

Hoy he estado bastante tiempo estudiando y haciendo deberes, como todos los domingos. Y, como todos los domingos, me vuelvo a decir a mí mismo lo mismo, que no me deje todo para el último día. Pero en fin, qué le voy a hacer, soy así.

Aún sigue intrigándome mucho el tema de las letras que aparecen aquí escritas y que, al parecer, sólo yo puedo ver. No he probado a enseñarle el "Adiós" que salió ayer a mi hermana, pero supongo que pasará lo mismo que con la frase del día anterior y no quiero que me tome por loco. Cuánto me gustaría desvelar este misterio... especialmente el porqué de la aparición de las letras, pero también me gustaría saber si soy un "elegido" o algo así y por eso sólo puedo leerlas yo...

>> Estas en lo cierto, eres un "elegido". MI elegido. Desde el momento que este diario salío a la venta lo destiné (me destiné, si se quiere ver así) a ti. Aunque, por supuesto, no lo sabías, no podías dejar de comprarme. Y a mí, no a cualquier otro. Me gustaría haber podido esperar algo más hasta desvelarme, pero fruto de la impaciencia cometí el error de desvelarme el primer día comentando tu nota. Y no quería que te volvieses loco, así que, tras unas dudas (que puedes ver traducidas por ejemplo en que ayer te dijera el "Adiós" y nada más), he decidido contártelo. Ahora, ya no hay misterio... o eso creo.

Pero... ¿por qué sólo leo las letras yo?

>> Ya te lo he dicho, eres mi elegido.

Y... ¿por qué lo soy?

>> Cuanta pregunta... pero bueno, entiendo que debes de estar bastante desconcertado. Te explicaré un poco: tú eres muy especial, Mario, no sé si lo sabrás y, como yo también soy muy especial... estamos hechos el uno para el otro. (Leve sonrisa)

Entiendo... Bueno, tengo que reflexionar sobre esto, aún no sé si lo he asimilado... Adiós

>> Hasta pronto.

Sábado, 8-11-08

Aún estoy dando vueltas a la frase que se escribió "sola" (o que no sé quién la escribió ni cómo). Supongo que ya lo habrás notado, pero te he abierto varias veces a lo largo del día, buscando que hubieran aparecido nuevas frases o palabras, o incluso alguna letra suelta. Pero nada, no ha aparecido nada nuevo... sólo las que ya aparecieron ayer, que siguen estando ahí, como queriendo demostrarme que no ha sido ninguna alucinación mía.

Y lo más desconcertante, le enseñé a mi hermana las letras que habían aparecido (por ser la persona en la que más confío, a ver si me podía dar algún consejo) y... ¡no las podía ver! Le insití varias veces señalándole donde estaban, pero nada, decía que ella no veñia nada. Al final tuve que irme disimulando mientras me miraba como si fuese un bicho raro.

Pero en fin, termino de escribir ya, aún intrigado, ya que no se me ocurre nada nuevo, ni tampoco ayuda que esté oyendo los gritos de mi padre de "¡GOOOL!", que está viendo su partido. Por lo que se ve, su equipo le debe de esatr dando una paliza al otro...

>> Adiós

Otra vez las letras... ¿Qué o quién eres?...

No hay respuesta de nuevo... en fin, adiós.

Viernes, 7-11-08

Aquí estoy de nuevo, otro día más, mi amigo (atreviéndome a excederme en el trato). Hoy todo ha sido igual... me he levantado a la misma hora de todos los días, he cogido el mismo autobús, he ido al mismo colegio, a la misma clase, he estado igual de solo en los recreos... y ahora vuelvo y, como ayer, vuelvo a escribir.

La verdad es que no sé mucho sobre que escribir... lo único que me ha pasado hoy así importante ha sido que he sacado un 9 en historia en el colegio...

>> ¿Un 9? Pero eso está muy bien,no?

¿Quién eres?

¿Quién eres?

Venga, sé que eso no se puede haber escrito solo...

Apagado o fuera de cobertura... no hay respuesta, no sé que ha podido ser... ¿magia? Quizá... bueno, ya investigaré más, ahora mismo estoy algo cansado, y ya he contado todo lo interesante que me había ocurrido... hasta hace unos instantes al menos.

Jueves, 6-11-08

Hoy te he comprado. Sí, a ti, que estás absorviendo ahora mismo la tinta del bolígrafo con el que estoy escribiendo. También te empiezo a escribir hoy.

¿Por qué empiezo? No sé... el aburrimiento, la soledad, las dos cosas... o incluso eso que dicen de que cuando las cosas van mal hay más ganas de escribir. Sea como sea, sentado en esta silla, en esta humilde casa donde vivo junto con mis padres y mi hermana, hoy, jueves, 6 de noviembre del 2008, empiezo a escribirte.

Como hoy no ha pasado nada especial, sino sólo son las ganas de empezar a escribir, te comenzaré contando como está la situación por aquí:

Me llamo Mario, tengo 15 años y vivo en esta casa de Santander (en la que ahora mismo estás) con mis padres, Francisco y Teresa, y mi hermana Alicia. Con los primeros... la verdad es que no me llevo muy bien. Antes discutíamos mucho... ahora ya no, en la soledad y aislación a la que me he sumergido por voluntad propia ni siquiera hablamos, así que discutir tampoco. Sin embargo, con mi hermana, aunque tenga tres años más que yo, siempre me he llevado bien, tiene un talento especial para comprender a las personas, y yo no soy ninguna excepción.

En el colegio se podría decir que todo marcha bien. No como tradicionalmente se entiende "marchar bien", sino según mi propio criterio. ¿Notas de clase? Perfecto, saco notas muy buenas, prometo, y tampoco tengo que esforzarme mucho, tengo facilidad. ¿Amigos? Ninguno, apenas hablo con mis compañeros, solamente lo necesario en clase, en los recreos me abstraigo en un lugar oscuro y apartado de los demás, donde escucho mis canciones, leo o incluso escribo yo mismo mis propios relatos o poemas. ¿Problemas? Nunca he tenido ninguno muy gordo, los demás se limitan a hacer como si no existiera, salvo en clase. No sé si es por voluntad suya o mía, o quizá es de ambos, pero tampoco me importa mucho sinceramente, la soledad, el silencio, la calma y la oscuridad son cosas que aprecio... o, mejor dicho, amo.

Otra cosa que amo es leer y, desde hace no mucho, también escribir. Por eso te compré y por eso te he empezado.